jueves, 19 de marzo de 2009

Mujeres al volante.

Conduzco hace bastantes años, y en mí ya experiencia en las carreteras puedo concluir que definitivamente el género no me ha acompañado. Nada peor que la mujer que va manejando al lado, esa que por verla a una toda regia sobre ruedas le tira el auto encima, no deja pasar, cuando se lleva harto rato señalizando y por un tema sentido común de las automovilistas femeninas debería tener la cortesía de permitir el paso, en vez de ponerse en medio metiendo su cacharro en el espacio que casi no existe.

Despúes de todo lo que hemos tenido que pasar las mujeres en la historia de la evolución de nuestra licencia de conducir, todo lo que nos costo obtenerla, todas las carteras que nos robarón los lanzas que por vernos todas vulnerables, nos crearón el shock del vidrio roto, el ruido del golpe, la cara espantosa del punga que asaltaba y que más encima se llevaba todas las valiosas pertenencias que hay en la cartera de una mujer. De todo lo que hemos tenido que luchar en demostrar que no somos tontas al volante, que sí, podemos chocar con la reja, topamos al auto de al lado, chocamos a 15 km/hr en el estacionamiento del mall, que nos cuesta más estacionarnos, que muchas veces todo es con tacos, y que también hay que muchas veces maquillarse en el auto, pero las estadísticas nos avalan indicando que los más grandes y fatales accidentes automovilisticos los provocan quienes nos enseñarón a conducir, es decir mis queridos hombres. O sea despúes de eso, deberíamos demostrar apoyo en las pistas, en vez de ese egoísmo propio que demuestran las féminas que nos encontramos en el camino, de no dejar pasar nunca, de tirar el auto encima , de ignorar las solicitudes de permiso urgente para cambiarnos de pistas, porque, por mirar el tipo de al lado nos distrajimos, y nada! , es como si despúes de todo sigamos siendo rivales en eso. Pero cuando los machos tiran la frase '' Mujer tenía que ser'' ahí recién nos acordamos del genéro, y nos sale esa woman revolucionaria sobre ruedas que llevamos dentro.

Así que, en consideración que cuando quede en panne en la calle, se me pinche un neumático, o me pase cualquier tragedia en carretera, lo más seguro es que opte como siempre por la seguridad de la ayuda masculina, o alguna de ustedes pararía a ayudar a otra fémina en desgracia? Yo, no.

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