viernes, 13 de marzo de 2009

Muerte a Murphy

El tan nombrado y su macabra ley, que puede en ocaciones funcionar bien, pero también hacer que todo lo que una pretenda, salga perfectamente mal. Como es posible, que sea tan factible y se cumpla todas las veces que sea posible, perjudicandonos la mayor parte de las veces, porque no sólo quiere decir que el pan siempre caerá con la mermelada hacía abajo, también dirá que lo tiene cuando no lo quiere y cuando no lo tiene, tampoco la van a querer.

Cuando una tiene alguna relación formal,aparecen siempre todos aquellos, que mientras estuvo sola no la conocian, pololeaban o no sé, les bajo el encantamiento con una justo cuando la vio ''no disponible''.
Se hace un esfuerzo titánico por la fidelidad, y no se aguanta más el ego en la nubes con tanto huacho primer corte que aparece de la nada, con invitaciones varias, mails, llamadas y sms a todas horas, el msn que colapsa cada vez que una se conecta porque te escriben todos, y una smile que no puede creer que la situación sea tan así, lo irresistibles que nos volvemos acompañadas, como si el hecho de estar ''ocupada'' nos hace ser increíblemente atractivas para todos los demas, y ''mírame de lejos que no me puedes tocar'', y por lo general son más de uno, y mas arriba la moral por favor.

Pero, cuando una decide volver a la soltería, o la deciden volver, es como si automáticamente tuvieramos un repelente de hombres, porque ahí ataca el feo del Murphy echándonos toda su ley encima, justo en ese minuto de necesidad extrema de manifestaciones sentimentales, y nos encontramos con que hasta el ''algo'', el ''peor es nada'', el amigo aventajado, incluso el menos parecido de los pretendientes, salió con la noticia, que ahora se comprometió, y no conocemos a nadie nunca más, por más que vamos a cuanto cumpleaños salga, bautizo, asado y lo que sea, más lindas y despampanantes que nunca, definitivamente no pasa nada. O sea, no nos queda mas que disfrutar dignamente la soltería, porque la ley dice que te vuelves soltera y no tendras ni perro que te ladre ni piojo que te ampare.

Entonces podríamos exigir el derecho a la información de la vigencia de dicha ley, porque la sola idea de saber que el día que mi estado cambie a ser ''soltera.con.compromiso'' más de uno va a querer acompañarme y con la única intención de boicotear mi opción, ahí me las tendre que ver, con la misma ley otra vez.

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