No era drogadicta ni alcohólica mis estimados, sólo que tengo que pagar el derecho a la existencia que me gané en la última maniobra automovilistica protagonizada por mi persona. La promesa; no tomo más. Imposible??, ver para creer me dijerón por ahí, y ya comenzé a dar a entender, que la rehabilitación existe...
El viernes, como invitada estelar al evento de la semana, veía como los absoluts, los sours y los lácteos como malicia me miraban, diciéndome ´´estamos aquí...para tí´´ y yo les sacaba la lengua con mi vaso de coca ligt con hielo, y los ignoraba como nunca, no faltando los incomprensibles, que dale con la tontera de intentar hacerme incumplir mi promesa, pero dejándoles bien en claro que lo que digo se cumple, -menos las dietas- porque para lo demás soy de muchísima palabra, y yo a accidentes aprendí la responsabilidad de la vida, y creo que es lo más serio que se me ha ocurrido en los últimos años, y por Dios que se va a mantener en esta oportunidad, porque creo que ya viví el año mas ´´on fire´´ de mi vida, el más adranalínico, lejos...el mejor, incluso con tanta barbaridad entre medio, que hasta eso tuvo demasiada gracia, y da capítulos a uno de los buenos años, porque insisto en que he vivido las mil y una maravillas, y luego de esta mañana en donde me acordaba que el alcohol y yo, si bien tuvimos una relación relativamente sana, en donde mi dignidad siempre estuvo presente, salvo los estados agónicos en que me veía algunas mañanas posteriores, donde juraba el clásico nunca más, podría creer que ya fue suficiente, y además podría mantener aún mejores recuerdos sin él, que con él, porque igual sería capaz de hacer varias cosas de nuevo, en donde el estaba de invitado.
En este caso no será necesario que evite lugares con su presencia, porque en varias oportunidades me vierón tomando té en pleno festejo, y quizás ahora no me vuelva siempre tan evidente, demás si lo consideramos, cada vez que uno toma, se le echa a perder el maquillaje y se le desordena el pelo, por más trabajo realizado antes, o no? a mi me pasaba y varias más también.
Porque de verdad que esto va a resultar y se magnimizara la memoria noctura, esa que le recuerda cuadros vividos a muchos que los olvidan en ciertos estados, y quizás hablé menos tontera, aún más para el olvido, y seguiré viendo como otros se pueden hasta transformar tomando un poquito de más, como la novia aquella que no se acordaba ni con quien se casaba con lo huasqueada que estaba, porque los nervios la tenían anorexica como hace una semana, y al primer brindis se le fue el alcohol al cerebro dejándola nockeada, y a varias sin posibilidad de ramo, porque no quisierón exponerla sola a la grabación de la noche en donde ni siquiera estaba para fotos, y eso que era todo demasiado nice en un cinco estrellas nacional, la hilacha colgaba igual ...
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