miércoles, 25 de noviembre de 2009

Y no existe

La rehabilitación no existe señores! He dicho.


Cuando una decide ser abstemia, es the real chancho en misa hasta en el cumpleaños del abuelito, porque resulta que una llega y quieren inmediatamente verla tomando algo con algún grado alcoholico y la insistencia se vuelve insoportable y resulta que una es toda rara si no toma más que coca cola o agua mineral. Pero cuando alguien deja de fumar, nadie le dice nada, se respeta más a quienes no quieren fumar más en la vida o estan en el intento, que a los que ya no quieren más alcohol en la sangre. Por lo que cumpliendo los 26 puse mi alcohonómetro en cero y empezamos otra vez.
Digna como siempre, inscrita en todos los happy hours de la semana. Nada que hacer, el sistema me obligó.

Salud.

1 comentario:

obiwuankenobi dijo...

Normalmente esto se debe al cambio animico que una persona experimenta al momento de ingerir algun grado alcoholico, asi, de esta forma, se esta a la par con quienes te rodean. Compartir cualquier tipo de actividad con amigos, familiares o compañeros, en el cual aparezca una de esas botellas de tapa rosca o corcho, o algun vaso con cualquier tipo de brebaje que estimule tus sentido animico, es infalible al momento de pasarlo bien. Es ilogico, pero a la vez cierto.... es raro en realidad. Salud.